Si bien nuestro futsal obtuvo la Copa Oro hace unas semanas en Mar del Plata, a Boca, en todas sus disciplinas, se les debe exigir competir al máximo y pelear por títulos todo el tiempo. Los muchachos del futbol sala lo están dando todo por conseguir el doblete de títulos locales, pero lamentablemente el torneo, pareciera que empieza a escaparse.

Tras golear al Talar por 4-0 en la fecha pasada y con esa victoria romper con la racha de dos empates seguidos, Boca nuevamente volvió a mostrar esa irregularidad que ha tenido durante este tramo. Si bien no hemos perdido, no ganar en 3 de los últimos 4 partidos, al estar compitiendo contra un rival tan fuerte como San Lorenzo, duele y mucho.

En lo que refiere al partido en sí, fue tan loco como los últimos partidos del Xeneize. Comenzamos ganando a los 18' del PT con gol de Pérsico, pero rápidamente la alegría se tornó en nervios cuando Ninotti fue expulsado al minuto del gol bostero. Pese a eso aguantamos el resto del primer tiempo, hasta que, en una ráfaga de dos minutos en la segunda mitad, el Rojo logró dar vuelta el partido.

Pero como siempre dicen, esto es Boca y al más grande nunca se lo da por muerto, y con todo en contra, con uno menos y tras tal vez un mal partido. Logramos sacar un punto de esta visita con un gol de Martín Giménez a poco del final.