El "Chelo". Solo con su apodo miles de imágenes se pasan por el recuerdo de todos los boquenses. A algunos se les pondrá la piel de gallina, reviviendo algún gol ante River con su famoso "tres dedos", o recordando cuando alzó uno de sus títulos internacionales. Un exitoso paso del delantero de Boca, que comenzó un 12 de Marzo pero del 2000.

Luego de mostrarse en Rosario Central, el Xeneize arregló su llegada con Racing, dueño de su pase. Debutó por el Torneo Clausura ante Argentinos, al ingresar un poco más de media hora, a manos de Carlos Bianchi. Paradojamente, por cómo estaba diagramado el calendario local, luego se jugó el Apertura, quién el campeón fue Boca y fue el primer título del Chelo.

En total alzó nueve Copas, entre las más memorables están, sin dudas, las tres libertadores (2000, 2001 y 2003) y la Intercontinental del 2000. Y no fue un simple espectador, sino que el Chelo tuvo mucho que ver con Conquistar América y el Mundo.

Vamos por parte. En el 2000 disputó ocho partidos de los 13 totales. No en todos fue titular, pero sí importante. Sobre todo en aquel histórico superclásico ante River, por cuartos de final. El Xeneize cayó 2 a 1 en el Monumental y en la Bombonera hizo historia. Casi hora de juego y el marcador seguía igualado. La presión caía pero en los pies de Román salió un centro pasado al segundo palo, para la llegada del Chelo a toda máquina y venció el arco de Bonano.

Boca viajó a Tokio. En la gran final ante el Real Madrid, los flashes son para Martín Palermo, pero la asistencia en el primer gol, fue del Chelo, a la llegada goleadora del Titán. Boca tocó el cielo y él fue participe del mismo.

Con otra espalda, en el 2001 tuvo más participación internacional en el primer equipo. Disputó 12 encuentros y anotó cinco goles. Clave en la ofensiva Azul y Oro. En ida de la final ante Cruz Azul en México, Marcelo fue el único autor del partido, para que el Xeneize defina con su gente y con la ventaja. Bonus track, Boca jugó con la casaca amarilla.

La gran cantidad de partidos, lo convirtió al Chelo en una de las principales cartas de gol para los dirigidos por Bianchi. La época dorada tiene una página que es dueño principal: fue el goleador absoluto de la Libertadores 2003, con 9 goles en 13 partidos. Gran protagonista, nuevamente, de la final boquense. Marcó tres goles, dos en la ida y una en la vuelta, ante el Santos de Brasil. También anotó en la semifinal. No solo cantidad de goles, sino en etapas decisivas y difíciles.

Marcelo Alejandro Delgado. El Chelo. Nueve títulos: Seis internacionales y tres locales. Supergoleador. Emblema de la época dorada. Sentido de pertenencia, con casi 200 partidos (193 en total). 50 goles en su paso por la Ribera como jugador; porque ahora es parte del Consejo de Fútbol. Ganó 110 partidos, cayó en 40, empató el restante. Historia viva.