Ya comenzamos la cuenta regresiva para un nuevo torneo. Al campeón todos le van a querer y eso lo sabemos. Por eso, con la seriedad que siempre Boca encara todo, tenemos que arrancar este trabajo de cara al estreno del domingo frente a Arsenal. Lo más importante ya lo dijimos: hay que mantener la estructura. El gran Bambino diría: ¡La base está!

El hecho de que no se fueran jugadores, solo el caso de Cristian Pavón y la incertidumbre por Agustín Almendra, hace que la maquinaria del campeón esté aceitada perfectamente. Se está hablando de Edinson cavani... Es casi un tema remanido que a veces aburre y esperaremos con calma. Si viene, excelente, y sino, con Darío Benedetto y Luis Vázquez seguirán temblando las defensas rivales.

Para mi gusto otro arquero de categoría no vendría mal... ¿no? ¿Agustín Marchesín? Podría ser. Tenemos que tener en cuenta que nos esperan tres competencias en cinco meses cuando otros solo jugarán un solo torneo.

Será el semestre para el despegue de Óscar Romero, Juan Ramirez, 'Changuito' Zeballos. También para que, ojalá, Sebastián Villa siente cabeza. Meses para consolidar, como la mejor zaga central, la de Carlos Izquierdoz y Marcos Rojo. Y porqué no, para que Alan Varela se transforme en lo que ya insinúa ser el mejor 5 del futbol argentino.

¿Se puede soñar con los tres logros? Claro que sí. Somos Boca. Acá hay amor, garra, historia, colores y una hinchada para eso.

El sorteo de la Copa Libertadores, como siempre, nos fue esquivo y fue favorable para los del enfrente, pero cuanto más complicado más nos gusta. En el torneo local los campeones somos nosotros y vamos con todo para ratificarlo. Los demás, los que sueñan con vernos abajo, tienen el problema. Nosotros seguimos disfrutando de los dulce que es ser campeones. Para volver a encarar cada competencia con la seriedad y responsabilidad que nuestra historia nos avala, calentamos motores para matar el frío y para avisar que el campeón está de vuelta.